Me levanto enchufado a la radio. Desayuno envuelto en periódicos. Almuerzo abducido por la televisión. Ceno envuelto en periódicos, repasando notas, planes e informaciones del día y medio abducido por la tele, otra vez. Me acuesto enchufado a la radio… Esto no es vida. Afortunadamente, el resto del tiempo lo paso pendiente del móvil, teléfono, entrevistas, reuniones, alertas, alarmas, agencias, medios online, blogs, charlando, contrastando y publicando fuera y dentro de Internet.
7 comentarios
Bah.. mientras no te enchufes un USB a la cabeza que mientras duermes te hace un resumen de la BBC, la CNN y Al Jazeera a la vez que te corrige y edita mentalmente tu próximo artículo sobre cabras abandonadas no pasarás de nivel… 😉
Un abrazo
Calla, calla, que las plantillas oyen 😀
Un saludo.
Eso usted lo llamara como quiera, pero les una adicción como la copa de un pino.
Como la del cantinero al vino 😉
Un saludo.
¡Pero que “xageraos” sois!! .. ¡Os quejáis de vicio!.. se os olvida un detalle, poneros por la noche para aprender idiomas, el método que utilizaba “Kissinger”.. 😉
Besos.. y menos mal que ninguno es “andalú”..
[…] las/os periodistas, enterarnos de todo lo que pasa en el mundo es el pan nuestro de cada día, pues vivimos permanentemente enchufados a la realidad. A algunas/os les inmuniza ésta exposición y a otras/os no. Yo por lo menos no […]
[…] La figura del periodista pues, sigue asegurando que la información que da es veraz y no pierde su función de intermediario con el receptor, la disciplina y la profesión no van a desaparecer porque varíe el medio, como no ha desaparecido con otros avances. Desde el periodismo ya se crea un concepto algo sarcástico del nuevo periodista […]