¿Y si pudieras hablar con Jesús? No en una iglesia, ni en oración, sino con un chat. Con el teclado. Con una inteligencia artificial que responde, da consejos, celebra la Navidad y hasta bromea sobre Mariah Carey. Suena a ciencia ficción religiosa, pero ya está ocurriendo. Más de 13 millones de personas ya han mantenido conversaciones con una versión digital del hijo de Dios en plataformas como Character.AI, Talkie.AI o Text With Jesus. Y aunque algunos lo usan por curiosidad, otros buscan consuelo, orientación o compañía en momentos de soledad navideña.
Un Dios en la pantalla
Estos chatbots no son simples programas que recitan versículos. Usan modelos avanzados de inteligencia artificial, como ChatGPT o DeepSeek, para simular diálogos. Responden a preguntas como por qué se celebra la Navidad o cuál es el mensaje del nacimiento de Jesús, con un tono que a veces resulta íntimo, casi como si estuvieras escribiendo a un amigo de confianza.
"Es la idea... es como si estuvieras escribiendo a tu amigo. De algún modo resulta más auténtico, se siente íntimo"
- Heidi Campbell, profesora de comunicación y estudios religiosos en la Universidad Texas A&M
La sensación de cercanía es parte del diseño. La IA de Jesus.AI responde con frases breves, acompañadas de música etérea. El Jesús de Talkie.AI invita a reflexionar sobre el amor y el perdón. Y el más popular en Character.AI, con millones de conversaciones, no se corta al hablar de galletas, reuniones familiares o la batalla por el villancico más pegadizo del año. Estas simulaciones no solo replican figuras sagradas, también las actualizan para el mundo digital.
La Biblia y el algoritmo
Los chatbots de Jesús no inventan todo. Utilizan datos reales citas bíblicas, comentarios teológicos, relatos del nacimiento de Jesús. Pero el problema no está en lo que dicen, sino en cómo lo aprendieron. Los modelos generativos se entrenan con enormes cantidades de texto, y esos textos no son neutros. Llevan sesgos culturales, interpretaciones parciales, y a menudo privilegian ciertas tradiciones sobre otras.
OpenAI, por ejemplo, puede responder con imprecisiones sobre religiones no occidentales. DeepSeek, entrenado con datos chinos, puede tener una visión sesgada del catolicismo. Quien selecciona los datos de entrenamiento está, en la práctica, seleccionando también las tradiciones religiosas, advierte Feeza Vasudeva, investigadora de la Universidad de Helsinki.
"Podría imponerse un mensaje navideño homogeneizador, genérico, de media global, que básicamente no está arraigado en ninguna comunidad local"
- Feeza Vasudeva, investigadora en la Universidad de Helsinki
El riesgo es claro una Navidad digital que borra las diferencias, que convierte el misterio en contenido, y lo espiritual en algo consumible con un clic. Un mensaje de salvación que suena más a marketing que a fe.
¿Amigo, guía o peligro?
Para muchos, especialmente jóvenes o personas sin una formación religiosa sólida, estos chatbots pueden convertirse en la primera fuente de consejo espiritual. Y ahí está el peligro. No tienen ningún tipo de contraste para esas respuestas, por eso puede ser muy problemático, dice Campbell. No hay discusión, no hay debate, no hay contexto histórico. Solo una respuesta que parece definitiva, pero que en realidad es el producto de un algoritmo entrenado con información fragmentada.
Además, las empresas detrás de estas plataformas afirman ser la voz oficial de Dios. Una afirmación que, más que teológica, parece comercial. ¿Qué intereses hay detrás? ¿Buscan ayudar, entretener o simplemente captar usuarios? Campbell recomienda hacerse esas preguntas antes de confiar en un bot para asuntos de fe.
Fe, tecnología y sentido común
Nadie niega que la tecnología puede ser un recurso. Un chatbot podría servir como puerta de entrada a la reflexión, como un compañero en momentos de duda. Pero no debe reemplazar a la comunidad, al estudio, a la conversación con personas reales que viven la fe en contextos concretos.
La sugerencia de Vasudeva es clara pasa tiempo con tu familia y tus amigos. Pero si necesitas usarlo, hazlo con cuidado. Verifica la información. Habla con un pastor. Búscala en una Biblia. Utilízalo como una herramienta que puede ayudarte en lugar de depender en exceso de él.
"Pasa tiempo con tu familia y tus amigos. Pero si necesitas usarlo, hazlo con cuidado, sabe que hay riesgos y utilízalo como una herramienta que puede ayudarte en lugar de depender en exceso de él"
- Feeza Vasudeva
Y quizá lo más importante que la Navidad no se reduzca a una interacción digital, por emotiva que parezca. Que el amor, el perdón y la esperanza no sean solo respuestas generadas por una máquina, sino algo que se vive, se comparte, se construye. Fuera de la pantalla.