Los móviles plegables ya no sorprenden tanto. Desde que Samsung abrió la puerta a este tipo de dispositivos, hemos visto pantallas que se doblan, se expanden, se convierten en tabletas. Pero ahora, el próximo salto parece claro los móviles que se pliegan tres veces. Un formato que hasta hace poco parecía ciencia ficción y que hoy está a punto de convertirse en rutina de bolsillo.
El triple doblez ¿lujo o evolución?
Huawei fue el primero en apostar fuerte por el concepto. Su lanzamiento de un móvil triplegable marcó un antes y un después, demostrando que era técnicamente viable. Poco después, Samsung lo siguió con el Galaxy Z TriFold, reforzando la idea de que este no era un experimento aislado, sino una nueva dirección para la industria. Y ahora, otro gigante se prepara para entrar en escena Xiaomi.
El dispositivo lleva años gestándose bajo el nombre clave de Xiaomi Mix TriFold. No es un prototipo más. Ya ha sido registrado en la base de datos de GSMA con el código 2608BPX34C, un paso clave en el camino hacia su certificación y comercialización. Este detalle técnico, aparentemente menor, es en realidad una señal clara el teléfono está mucho más cerca de lo que pensábamos.
Una pantalla casi de sobremesa
Lo que más llama la atención del Xiaomi Mix TriFold no es solo que se doble tres veces, sino el tamaño final que alcanza. Su pantalla interna crecerá hasta las 10 pulgadas, una dimensión que ya roza la de muchas tabletas pequeñas. Imagina sacar el teléfono del bolsillo y desplegarlo como un acordeón tecnológico hasta tener una superficie de visualización más grande que la de algunos ordenadores portátiles de hace una década.
Este tipo de dispositivos borra cada vez más la línea entre móvil, tablet y ordenador personal. Con una triple cámara principal y dos cámaras para selfies una en la pantalla interna y otra en la externa el enfoque parece claro no se trata solo de innovar en forma, sino de ofrecer una experiencia completa.
Y aunque aún no hay confirmación oficial sobre el procesador o la batería, todo indica que seguirá la estela de la línea Mix, donde Xiaomi ha ubicado sus dispositivos más innovadores y arriesgados. La serie Mix siempre ha sido el laboratorio de ideas de la marca, desde los primeros bordes curvados hasta los pop-ups mecánicos. El TriFold sería su evolución más ambiciosa.
Un precio que aún quema
El coste es, por ahora, el gran freno. Los triplegables actuales rondan los 3.000 euros, una cifra que sitúa estos dispositivos en el terreno del lujo más absoluto. Para la mayoría de los usuarios, es más barato comprarse un smartphone y una tablet por separado.
"La innovación siempre arranca cara, pero la competencia la abarata"
Pero aquí es donde entra en juego el papel de Xiaomi. La marca china ha ganado reputación por democratizar tecnologías que otros lanzaron como exclusivas. Lo hizo con los móviles sin marcos, con las cámaras pop-up, con las pantallas de alta frecuencia de refresco. Y podría hacerlo de nuevo con los triplegables.
Si Xiaomi logra ofrecer un dispositivo con prestaciones similares a un precio notablemente inferior, podría forzar una reconfiguración del mercado. No sería el primero en llegar, pero podría ser el primero en hacerlo accesible. Esa es, al fin y al cabo, su especialidad.
¿Qué viene después del plegado?
Mientras tanto, la pregunta que flota en el aire es obvia ¿hasta dónde puede llegar esta evolución? ¿Veremos móviles que se doblan cuatro veces? ¿Que se enrollan como un pergamino? Los límites, por ahora, están más en los materiales que en la imaginación.
El tercer trimestre de 2026 podría marcar un punto de inflexión. No solo por el lanzamiento del Xiaomi Mix TriFold, sino por lo que representa la consolidación de un nuevo formato que, con el tiempo, podría dejar de ser una curiosidad para convertirse en algo habitual. Como lo fueron, en su día, los móviles táctiles o las cámaras de alta resolución.
La tecnología no avanza en línea recta. Da saltos, tropiezos, vueltas inesperadas. Y a veces, el futuro entra en tu bolsillo doblado por tres lados.