…Es que los fundamentalistas del derecho de autor vuelven a hacer de las suyas. La SOCAN, una organización que agrupa a artistas y productoras discográficas canadienses, anda estos días amenazando con querellarse contra el gremio de barberos de su país si mantienen su negativa a pagar por la música de fondo que ofrecen en sus establecimientos. No crean que es producto de un error o una excepción: hace algún tiempo hicieron lo propio con los dentistas.
Como cuentan en Abadía Digital, sólo falta que la SGAE se entere y se ponga manos a la obra en nuestro país. Ya no se podrá ni entonar aquello de “Fígaro Fígaro Fígaro“… Qué cosas, en fin… cuando las barbas de los barberos veas pelar…
Actualización (24 jul-20.21 h): La realidad supera a la ficción: ¡Qué digo que la SGAE se entere! Como apuntan en los comentarios, ¡es precursora, que nada menos!